Por estos días, en Newell's no sólo se habla del clásico de la ciudad del próximo domingo frente a Rosario Central en el Gigante de Arroyito. En los pasillos y alrededores de la entidad rojinegra, también existen otras preocupaciones, que nada tienen que ver con lo deportivo. Porque Newell's, en el pasado mes de diciembre, logró salir de la crisis dirigencial e institucional más grave de su historia, la de la era de Eduardo López al frente de la presidencia del club. Por eso la actual comisión directiva, además de tratar de conformar un equipo competitivo, también lucha contra la injusticia. Contrarrestar la herencia paupérrima que dejó López, además de alejar del Coloso del Parque a todos sus compinches a quienes les dejó su legado e ideología basada en la violencia, los barras. Allí está la misión. Por la que imploran todos los hinchas leprosos. La de volver a ser un club común y corriente, el lugar de encuentro de la mitad de los habitantes de Rosario.

En tiempos de democracia en la República Argentina igualmente, de más está decir, que desde 1983 hasta los días que corren, se registraron un sinfín de hechos que nos remonta inmediatamente hacia los años de Dictadura. El calvario del club Newell's Old Boys de Rosario es uno de ellos. La hegemonía del polémico empresario Eduardo López al frente de la institución, duró catorce interminables años, en los que no hubo elecciones. Hasta que en diciembre de 2008, los socios rojinegros finalmente pudieron elegir. Y el resultado en las urnas fue irrefutable: la oposición encabezada por el abogado Guillermo Lorente obtuvo 3.967 sufragios, contra los 1.967 votos de la lista oficial que postulaba al mismo López. Es decir poco más del doble. Cifra contundente para así cerrar la etapa institucional más oscura de la entidad rosarina.
Fueron catorce años sin democracia, donde el poder quedó al mando de un grupo reducido, que en un principio era considerado el más capacitado para tomar el timón, pero que luego el tiempo se encargaría de condenarlos como los culpables del "casi" hundimiento del barco. Porque la ríquísima historia de Newell's estuvo a un paso de ser sólo un recuerdo créame. De hecho, el club sigue lidiando con la penosa herencia que dejó Eduardo López, que sin dudas puso en peligro el patrimonio de la entidad rojinegra. Destrozos en las instalaciones (con la complicidad de sus barras aliados obviamente), deudas millonarias, y la inexistencia de escrituras de los inmuebles, contratos de jugadores e infinidad de cheques , es el triste saldo con el que los actuales dirigentes, comenzaron el nuevo mandato. Gracias al aporte económico de glorias surgidas de la institución, tal es el caso por ejemplo del jugador del Barcelona Lionel Messi, Newell's puede de a poco salir a flote. Sin dudas, la ayuda de quienes quieren realmente al club, es una caricia al corazón.
Que me vienen a hablar de legitimidad cuando la misma se logra con el voto de la gente, que no pudo expresarse durante catorce años; ni mucho menos de representatividad y sólida administración según los defensores de López (auténticos caraduras), cuando corrió peligro la existencia de la institución y cuando los socios se tuvieron que autoconvocar, reclamando durante tanto tiempo que se respete su derecho a elegir. Porque la oposición siempre existió, está claro, pero en 1997, 2000 y 2003, se prohibieron las elecciones.
Además, que me vienen a hablar de democracia basada en la participación del pueblo, cuando el socio luchó desde 1994, al notar que las promesas nunca se cumplieron, que los encargados de llevar los pantalones largos en el club nunca dieron la cara, actuando siempre de forma soberbia, jamás existiendo las palabras acuerdo y negociación en su accionar. Al socio no se lo escuchó, hasta que salió a la calle, y exigió un cambio, rápido y necesario. Eso sí, tuvo que lidiar con la violencia, propia de la vieja dirigencia, que contaba con barra-bravas de empleados que agredían a aquellos que quieren a Newell's de verdad, por el sólo hecho de ser una herencia familiar, el club de su barrio, ó el simple color de la camiseta. Ésos son los verdaderos hinchas, los que no buscan ningún beneficio, sólo la alegría que te puede dar la victoria de su equipo. La voluntad aquí, de ninguna manera fue conjunta. Porque la violencia, no es sinónimo de diálogo.
En un país representativo y republicano, las irregularidades también existen. Porque Argentina es un país poco serio, eso ya todos lo sabemos, y como éste caso en particular, hay miles. Muchas instituciones, en este caso un club, algo importantísimo para la sociedad, que se vio representado por gente a la que no se eligió, ni mucho menos se reeligió.
Al menos, en Newell's Old Boys, hoy reina la paz. Con muchas dificultades y necesidades, sí. Pero reina la paz. Ése deseo permanente de "que se vayan todos" ya pasó. Newell's y su gente lo sufrieron. Porque en tiempos de democracia, hubo una Dictadura. La del señor López.

2 comentarios:
MUY BUENO NICOLA''!!!!!
esta muy completo y muy buen tema...
la deuda se estima en mas de 15 millones de pesos... y el unico fondo que dejo lopez fueron las cuotas truchas (la ultima artimaña de lopez para q impedir que la gente votara).
Y AHI es donde participo Messi, poniendo plata de su bolsillo desinteresadamente para poder pagarle a los seguidores del Mo.Le. las cuotas que te dije antes.
(Ahora parece q el padre de messi estuvo por el predio porq quieren seguir invirtiendo en el club... NO SE muy bien EN QUE, creo que en infraestructura para donde entrenan)
EN fin, excelente nicola'!!! re groso
un abrazooo y a ver cuando nos veoms che ! adioss
Julian
Muy completo el análisis. Saludos
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